La desaparición del soldado Mellino

mellino aparecidos apHelvio Alcides Mellino ingresó como colimba a la Armada Argentina el 2 de marzo de 1976. Fue asignado a la Base Naval Puerto Belgrano, con último destino en el Batallón de Comando de la Base Naval de Infantería de Marina.

En septiembre de ese año un grupo de civiles armados allanó la casa de su familia en La Plata. Un mes después, Mellino fue transferido de la Sección Imprenta a la Sección Baterías donde no cubría guardias ni tenía puesto fijo. Luego de un tiempo sin noticias del hijo, sus padres viajaron a Puerto Belgrano donde les informaron que Helvio había salido de franco y, al no regresar, había sido declarado desertor. Aún permanece desaparecido.

En la audiencia del jueves 18 de diciembre del juicio contra 25 represores que actuaron en jurisdicción de la marina, tres testigos dieron cuenta de su preocupación por el cambio de tareas en la base naval y vincularon su desaparición a una detención anterior por su militancia en un grupo estudiantil anarquista contra el examen de ingreso para la carrera de Arquitectura en la Facultad de La Plata.

El juicio continuará los días 3 y 4 de febrero de 2015 desde las 9 en Colón 80 de Bahía Blanca.

María Graciela Fachal era vecina de la familia Mellino en La Plata. Recordó que Helvio «estaba preocupado por las cosas que faltaban en el barrio, una luz de mercurio en una esquina o conchilla para la calle que no tenía asfalto». La última vez que se vieron fue antes de que el joven ingresara al servicio militar en Puerto Belgrano, ella mantuvo el contacto con sus padres.

Manifestó que «cada tanto tenía un franco y viajaba a La Plata, tuvo a fines del ’76, pero para el ’77, como no recibían noticias viajaron. Ahí les dicen que lo habían enviado en comisión a La Plata, creo que a hacer un trámite en la universidad y que no había regresado y por eso lo habían declarado desertor. Ahí los padres se enteran que su hijo no estaba más haciendo el servicio militar».

«Nunca tuvieron información, sé que presentaron habeas corpus. Era único hijo Helvio, sé que se movieron muchísimo esos padres. Hasta el último día de sus vidas se movieron buscándolo», recordó Fachal y agregó que después de algunos meses de colimba, el estudiante habló a sus padres sobre su preocupación por el cambio de tareas en la base. «Eso fue cercano a que en la casa de los padres hubo un allanamiento del que nunca tuvieron explicaciones».

Más adelante la testigo relató que también su casa fue requisada el 6 de junio de 1978. Ella estaba embarazada de cinco meses y en compañía de sus otros dos chicos. Buscaban a su esposo que estaba internado en el Hospital de San Martín. «Lo llevaron de allí, estuvo secuestrado, compartió con Mariana Arcondo de Tello y otros amigos la desaparición en ese centro clandestino y 42 días después le dieron la libertad. Estuvo en el Banco».

Mariana Patricia Arcondo aseguró que Mellino «era afín a las ideas por las cuales militábamos en un grupo anarquista estudiantil» y vinculó directamente su desaparición con una detención ocurrida en 1975.

Por entonces, Helvio estaba por ingresar a la Facultad de Arquitectura y ella ya cursaba el tercer año. Junto a un grupo de compañerxs se reunieron a redactar un volante para «expresar nuestro disgusto por el curso de ingreso que se estaba haciendo. En esa circunstancia nos metieron presos».

«Empezamos a tener una historia más de perseguidos porque a raíz de eso tanto a él como a mí y otras personas nos fueron a buscar a nuestras casas. Él nos visitó cuando estábamos viviendo -con mi esposo Rafael Tello- en Ituzaingó. Le habían dado una licencia en el regimiento para las fiestas del ’76. Fue la última vez que lo vi. No nos frecuentábamos mucho porque nos habíamos ido a Buenos Aires por las persecuciones», dijo.

Helvio les contó «que estaba muy preocupado por su integridad física por las cosas que estaban sucediendo en el regimiento. Él hacía la colimba en Puerto Belgrano. Después me enteré que siendo conscripto lo desaparecieron. (…) Los padres presentaron dos, tres, cuatro habeas corpus y se dedicaron a hacer rondas con las Madres de Plaza de Mayo porque estaban absolutamente convencidos que era un desaparecido».

El grupo estudiantil en el que militaban se llamaba Grupo de Resistencia Anarquista o Grupo Revolucionario Anarquista y tras el golpe de Estado pasó a denominarse Resistencia Libertaria. «Después de la desaparición de Mellino, varios del mismo grupo estuvimos detenidos desaparecidos, además varios de nosotros hemos sido idos a buscar por civiles armados y con anteojos negros y sobretodo, con fotos nuestras tomadas el día que nos detuvieron por haber estado haciendo el volante», comentó Arcondo.

Ella misma fue secuestrada en 1978: «Me llevaron a un campo de concentración, me quitaron la identidad, me pusieron un número. Me tuvieron engrillados los pies y esposadas las manos durante 16 días, me torturaron. Fue en el mundial de fútbol. También se lo llevaron a mi esposo y no lo hicieron aparecer nunca más».

Leticia Marina Galindo compartió con Mellino la militancia en grupos estudiantiles «para mejorar espacios de enseñanza» tanto en la secundaria como durante el ingreso a la Facultad de Arquitectura de La Plata.

Fue otra de las detenidas por el volante contra el examen de ingreso: «En enero del ’75 estando en una reunión con otros ingresantes o alumnos de Arquitectura, cinco mujeres, dos varones y dos criaturitas, entra gente y nos detienen. Nos requisan, nos llevan en autos particulares a una comisaría, nos vuelven a tomar datos, varias horas y después nos separan a los varones de las mujeres. A ellos los dejan ahí y a nosotras (nos llevan) a otro lugar, nos revisan, nos vuelven a tomar datos y nos trasladan a una comisaría de mujeres. Nos tomaron fotografías, registro digital, nombre, domicilio, yo era menor de edad así que datos de mis padres».

En agosto del mismo año “gente no uniformada requisó la casa de mis padres preguntando por mí y al mismo tiempo a una o dos personas de ese grupo estoy segura que fueron a buscarlos. En el ’76, hacia septiembre u octubre, tal vez un poco más, vuelven a esa dirección y hacen lo mismo. A consecuencia de esa detención nos fueron a buscar con fotos tomadas en esa ocasión».

Finalmente, la testigo entregó al tribunal copia del segundo pedido de habeas corpus de 1979 firmado por la madre de Helvio, «en el cual dan cuenta de que le habían dado licencia en el regimiento, que había sido cambiado de lugar de trabajo ahí adentro y que en esa ocasión había desaparecido».

Retrato de Helvio Mellino tomado de Aparecidos (Colimbas).

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